Diferentes tipos de guarniciones vegetales
Una guarnición es un elemento o sustancia que se utiliza como decoración o adorno que acompaña a un plato de comida o bebida preparada[1] y que, en muchos casos, puede dar un sabor añadido o contrastado. Algunas guarniciones se seleccionan principalmente para aumentar el impacto visual del plato, mientras que otras se seleccionan específicamente por el sabor que pueden impartir[2] Esto contrasta con un condimento, una salsa preparada que se añade a otro alimento principalmente por su sabor. Un alimento que se sirve con guarnición puede describirse como garni, el término francés para “adornado”.
Muchas guarniciones no están pensadas para ser consumidas, aunque para algunas está bien hacerlo. El perejil es un ejemplo de guarnición tradicional; esta hierba verde y picante tiene hojas pequeñas y bien definidas, tallos firmes y es fácil de recortar en forma de guarnición.
Una guarnición hace que los alimentos o las bebidas sean más atractivos visualmente[3][4]. Pueden, por ejemplo, realzar su color,[3] como cuando se espolvorea pimentón sobre una ensalada de salmón. Pueden proporcionar un contraste de color, por ejemplo cuando se espolvorea cebollino sobre las patatas. Pueden hacer que un cóctel sea más atractivo visualmente, como cuando se añade una sombrilla de cóctel a una bebida exótica, o cuando se cubre un Mai Tai con cualquier número de trozos de fruta tropical. El sushi puede adornarse con baran, un tipo de hierba u hoja de plástico. A veces se utilizan conjuntamente una guarnición y un condimento para terminar la presentación de un plato; por ejemplo, un plato principal puede estar cubierto con una salsa, como condimento, junto con una ramita de perejil como guarnición[cita requerida].
Tipos de guarnición verde
El término francés Garni dio origen a lo que hoy conocemos como guarnición (literalmente, decorar o embellecer), una técnica para terminar un plato que se adopta en todo el mundo de todo tipo de formas extrañas y maravillosas.
A la hora de dar el toque final a un plato, tenga en cuenta que la guarnición puede servir para dar sabor o para decorar. Si es para dar sabor, el ingrediente de la guarnición debe ir en consonancia con el sabor del plato.
Hay muchos tipos de guarniciones. Pueden adoptar la forma de brotes de hojas, hierbas, salsas o un jugo. Pueden ser picatostes para ensaladas o sopas, o verduras en juliana o trocitos de tocino sobre un plato.
Algunas ideas sencillas son el limón confitado en rodajas sobre una tarta de queso o el tomate sobre un plato de pasta. Incluso una pizca de semillas sobre un postre puede ser una guarnición. Un chorrito de aceite alrededor de un plato principal o el cebollino espolvoreado sobre el marisco constituyen un acabado perfectamente adecuado. Y no olvide la fruta fresca con los cócteles.
Si no se trata de una salsa, la guarnición debe ser siempre desmontable, ya que no a todos los comensales les gusta comerla. La guarnición también depende del tipo de plato que se sirva: un plato caliente, un plato frío, un buffet o un postre. Basta con alejarse del plato, echar un vistazo y ver si funciona visualmente.
2
Cuando tienes amigos y familiares en casa, es bueno servir una comida fantástica y presentarla de forma bonita. A todo el mundo le gusta un plato cuidadosamente elaborado: demuestra que has pensado mucho en la planificación de la comida.
Sea cual sea la ocasión, la comida debe ser más atractiva que las papilas gustativas. Una buena comida tiene que ver con el atractivo visual y la experiencia general. En lugar de emplatar la comida por sí sola y servirla inmediatamente a tus invitados, ve más despacio y llena el espacio del plato. No tiene por qué haber mucha más sustancia, sino más bien unas cuantas cosas que sirvan para dar forma a tu obra maestra.
Incluir frutas y bayas en tu plato ayuda a que tu comida parezca más fresca, más brillante y más unida. Además, puedes absorber todas las vitaminas que se encuentran en la fruta, como la vitamina C y la vitamina A.
Piensa bien en lo que vas a servir y en qué otros sabores les gustarán a tus invitados. Por ejemplo, si vas a servir tortitas de arándanos o tostadas francesas, siempre puedes incluir una pequeña ensalada de frutas al lado. Esto crea un sorprendente contraste con el esponjoso y dorado desayuno que también se encuentra en el plato.
Tipos de guarniciones para postres
Planifique siempre la guarnición como parte del plato, no como una idea de última hora; recuerde que la gente come primero con los ojos. Hacer que un plato sea visualmente atractivo no tiene por qué ser difícil, ni llevar mucho tiempo, ni requerir ninguna habilidad artística. Así que, incluso si eres nuevo en este tipo de cosas, disfrutarás de los sencillos y deliciosos ejemplos de guarnición que he compartido a continuación.
Ten en cuenta que la guarnición debe realzar el sabor de un plato y hacer que destaque, a la vez que invita a la gente a comer. Esa es la principal diferencia entre las guarniciones y las decoraciones, que sólo sirven como elemento visual.
Si tuviera que recordar una sola cosa de este artículo, espero que fuera este consejo: planifique siempre su guarnición como parte de su plato, no como una idea de última hora; recuerde que la gente come primero con los ojos.
Recordando la cocina de mi abuela o de mi madre, siempre adornaban la comida con verduras que complementaban el plato o con hierbas, pimentón y ese último chorrito de aceite de oliva. De hecho, dondequiera que fueras o te invitaran, la guarnición se ponía naturalmente sobre la comida, aunque fuera una simple hoja de menta.