Crema de mantequilla congelada
Asegúrese de cubrirlo bien pero no lo refrigere. Si no tiene una tartera, cubra la tarta con un bol grande invertido, cúbrala con papel de aluminio o guárdela en un recipiente grande y hermético. Guárdelo a temperatura ambiente durante unos 5 días. Congélelo para conservarlo durante más tiempo, hasta 3 meses.
Asegúrese de cubrirlo bien, pero no lo refrigere. Si no tiene una tartera, cubra el pastel con un bol grande invertido o guárdelo en un recipiente grande y hermético. Guárdelo a temperatura ambiente durante aproximadamente 5 días. Congele para una conservación más prolongada, hasta 2 meses.
Asegúrese de cubrirlo bien, pero no lo refrigere. Si no tiene una tartera, cubra el pastel con un bol grande invertido o guárdelo en un recipiente grande y hermético. Guárdelo a temperatura ambiente durante aproximadamente 5 días. Congele para una conservación más prolongada, hasta 2 meses.
Asegúrese de cubrirlo bien pero no lo refrigere. Envolver herméticamente en papel de plástico o en papel de aluminio a menos que la receta indique lo contrario. Almacenar a temperatura ambiente durante aproximadamente 5 días. Congelar para una conservación más prolongada, hasta 3 meses.
Panadería Hummingbird
Cuando se guardan adecuadamente, los pasteles se conservan bien en el armario de la cocina, en el frigorífico o en el congelador, pero su conservación dependerá de una serie de factores. A continuación te indicamos algunos aspectos que debes tener en cuenta a la hora de guardar tus pasteles para otro día.
Creemos que los pasteles frescos tienen mejor sabor, por lo que recomendamos consumirlos en las 24 horas siguientes a su elaboración. Los pasteles son perecederos y deben consumirse lo antes posible si contienen ingredientes húmedos como fruta fresca, compotas de fruta o productos lácteos frescos como nata, queso fresco, mascarpone o natillas.
Cubrimos nuestros bizcochos completamente con glaseado, ya que esto ayuda a que los bizcochos no pierdan humedad. Si se ha aplicado el glaseado a la tarta o se ha dejado el bizcocho al descubierto, es más probable que se seque durante el almacenamiento.
Envuelve siempre bien los bizcochos, magdalenas o trozos de tarta en film transparente. Esto es para crear una barrera protectora y evitar que se sequen. Asegúrese de que todos los lados cortados estén completamente cubiertos para evitar que el bizcocho se seque.
En el caso de los pasteles ya glaseados, envuélvalos bien en film transparente, enteros o por trozos, y colóquelos en un recipiente de plástico hermético o en una bolsa hermética con cierre. Esto evitará que absorba los sabores del congelador.
Cómo guardar la tarta de un día para otro antes de escarcharla
Si los pasteles pudieran durar para siempre, sería una bendición. Ya no tendríamos que preocuparnos de mantener un pastel fresco o de cómo evitar que se estropee. Sólo tendríamos que vivir el sueño de la crema de mantequilla, trozo tras trozo. Esta guía puede ser tu ruta hacia el paraíso de los pasteles. Aquí tenemos los consejos de almacenamiento que te ayudarán a saber cómo mantener un pastel húmedo después de hornearlo.
Tanto si su tarta está glaseada, cubierta de fondant, rellena de crema o es simplemente un bizcocho sin cortar, la mayoría de las tartas pueden soportar la temperatura ambiente durante varios días. Sólo tienes que colocar tu obra maestra en un soporte para tartas con una tapa, o en un recipiente invertido, para protegerla del polvo del aire.
Si te preocupa que tu tarta se derrita -por ejemplo, si tiene un relleno de fruta-, lo mejor es que la pongas en la nevera para que se mantenga fría. Para que el sabor afrutado siga intacto, tápalo y ponlo en un recipiente con cierre hermético. Esto evitará que el pastel absorba cualquier olor extraño de la nevera.
Por lo general, un pastel sólo se mantiene fresco durante tres o cuatro días antes de que se extraiga la humedad y la textura se vuelva más seca. Un pastel puede durar un poco más en el frigorífico si ha sido glaseado, ya que el glaseado mantiene la humedad en el bizcocho. Para que conserve su forma, ponga el pastel en la nevera durante 30 minutos en un recipiente con cierre hermético o cubierto sin apretar para que el glaseado se fije. A continuación, cúbralo bien con papel de plástico y vuelva a ponerlo en un recipiente con cierre hermético en la nevera.
Cómo mantener el pastel fresco
La vida no siempre nos da el tiempo necesario para preparar ocasiones como cumpleaños, aniversarios y promociones. Por eso, si tienes que preparar un pastel con antelación, te damos algunos consejos sobre la antelación con la que debes hacerlo.
Sin hielo: Si no necesitas ponerle hielo a tu pastel hasta el día, puedes hornearlo con al menos 2 o 3 días de antelación. Pero tendrás que guardarlo con cuidado. Envuélvelo y séllalo en un recipiente hermético para que no pierda humedad.
Con hielo: El glaseado retendrá la humedad, pero si haces un glaseado de crema de mantequilla o de queso crema, sólo tendrá un par de días antes de necesitar ser refrigerado o congelado. Lo ideal es hacer un pastel helado el mismo día para mantenerlo fresco.
Refrigerado: Los pasteles durarán más tiempo en el frigorífico, pero para un evento no querrás presionarlos más de unos 3 días. Asegúrate de envolverlos con cuidado y de sacarlos durante una hora para que vuelvan a estar a temperatura ambiente antes de servirlos.