Tipos de cerveza
La cebada malteada son granos de cebada que han iniciado el proceso de germinación. El proceso de malteado se realiza para que se formen las enzimas del grano necesarias para convertir los almidones que contiene en azúcar.
La molienda es un proceso en el que se aplasta la cáscara o capa exterior del grano y se rompe la interior para permitir que el licor de maceración acceda a todo el grano. Este es un paso muy crucial en el proceso, ya que una molienda inadecuada puede romper una cerveza antes de que la elaboración haya comenzado. La clave es aplastar los granos lo suficiente como para dejar al descubierto el centro amiláceo de la semilla de cebada sin dañar las cáscaras de los granos que los recubren.
El macerado es el término cervecero que designa el proceso de remojo en agua caliente que hidrata la cebada, activa las enzimas de la malta y convierte los almidones del grano en azúcares fermentables. Los cerveceros controlan muy de cerca las temperaturas de maceración. Los tipos de azúcares que producen las enzimas pueden controlarse mediante el aumento y la disminución de la temperatura.
La filtración es un proceso de elaboración de la cerveza en el que el mosto se separa en dos formas: el grano residual y el líquido claro azucarado conocido como mosto. El mosto da a la cerveza sus sabores fundamentales, incluidos los de los granos y el lúpulo que la receta del cervecero exige.
Diagrama de flujo del proceso de elaboración de cerveza
Desde 1985 hay ocho deliciosas Us Heit – cervezas especiales elaboradas con pasión por el maestro cervecero Aart van der Linde. Para la producción y el suministro de materias primas sólo utilizamos proveedores de la zona. Toda la producción de nuestros productos se organiza de manera que tengamos controlado todo el proceso, desde el agricultor hasta el consumidor. Optamos de forma muy consciente por este método de producción responsable. No porque sea más barato, porque la producción no es más sencilla ni más barata, sino por el carácter extra que podemos dar a nuestros productos a través de este método de elaboración y destilación.
Cuando vamos a elaborar cerveza, el proceso comienza con la malta. La malta es cebada que se compra a un agricultor de nuestro entorno inmediato. En nuestra propia maltería, la cebada se pone en remojo, se germina y se seca. Diversos tipos de malta dan a la cerveza su color y un sabor refinado. Además, la cerveza debe su hermosa espuma a la malta. Tras el proceso de malteado, primero se hace un macerado de malta y agua. El líquido dulce que se produce en este proceso se hierve.
Producción de cerveza
La elaboración de cerveza consiste en remojar una fuente de almidón (normalmente granos de cereales, el más popular de los cuales es la cebada)[1] en agua y fermentar el líquido dulce resultante con levadura. Puede realizarse en una fábrica de cerveza por un cervecero comercial, en casa por un cervecero casero, o de forma comunitaria[2] La elaboración de cerveza se lleva a cabo desde aproximadamente el sexto milenio a.C., y las pruebas arqueológicas sugieren que las civilizaciones emergentes, incluyendo el antiguo Egipto[3] y Mesopotamia, elaboraban cerveza[4] Desde el siglo XIX la industria cervecera ha formado parte de la mayoría de las economías occidentales.
Los ingredientes básicos de la cerveza son el agua y una fuente de almidón fermentable, como la cebada malteada. La mayor parte de la cerveza se fermenta con levadura de cerveza y se aromatiza con lúpulo[5]. Las fuentes de almidón menos utilizadas son el mijo, el sorgo y la yuca[6]. También se pueden utilizar fuentes secundarias (adjuntos), como el maíz, el arroz o el azúcar, a veces para reducir el coste o para añadir una característica, como añadir trigo para ayudar a mantener la espuma de la cerveza[7]. [7] La fuente de almidón más común es el cereal molido o “grist”; la proporción de los ingredientes de almidón o cereal en una receta de cerveza puede denominarse grist, grain bill o simplemente ingredientes del macerado[8].
Fábrica de cerveza
Antes de poder disfrutar de una deliciosa cerveza, ésta ha pasado por varias etapas. Cada paso del proceso de elaboración contribuye al carácter único de nuestra cerveza. La elaboración de la cerveza se lleva a cabo con cuidado, pasión y experiencia para/en nuestra instalación cervecera. La artesanía del pasado se combina con la tecnología moderna.
Los granos no pueden ser procesados directamente de la tierra en la cervecería. Primero deben ser malteados en una maltería. Este proceso consta de cuatro pasos: limpieza, remojo, germinación y secado. Para variar el sabor, la malta se carameliza o se tuesta. Para las cervezas rubias se utilizan maltas claras y para las oscuras se añaden maltas extra oscuras.
Al principio del día de elaboración de la cerveza, se raspa la malta. El raspado es la trituración de los granos de malta para que se libere el almidón, pero las cáscaras (cascarillas) permanezcan intactas. Esta trituración se realiza en un molino de chatarra con dos rodillos entre los que se trituran los granos.
Cuando el agua de cocción en la caldera de cocción ha alcanzado la temperatura adecuada, la malta desechada se vierte en la caldera. A continuación, esta “masa” se calienta por etapas. Durante este proceso, el almidón se convierte en diferentes tipos de azúcares. Las diferentes temperaturas son necesarias porque las enzimas son activas a diferentes temperaturas. Estas enzimas convierten el almidón en azúcares fermentables. Los azúcares fermentables son convertidos en alcohol por las células de la levadura y los azúcares no fermentables quedan como “dulzor” en la cerveza.