Patatas a la riojana
Rioja es una región vitivinícola de España, con denominación de origen calificada (D.O.Ca., la categoría más alta de la normativa vitivinícola española). El vino de Rioja se elabora a partir de uvas cultivadas en las comunidades autónomas de La Rioja y Navarra, y en la provincia vasca de Álava. Rioja se subdivide a su vez en tres zonas: Rioja Alta, Rioja Oriental y Rioja Alavesa. Tradicionalmente, muchos vinos han mezclado fruta de las tres regiones, aunque hay un lento crecimiento de los vinos de una sola zona.
Situada en el extremo occidental de la región y a mayor altura que las demás zonas, la Rioja Alta es más conocida por su estilo de vino del “viejo mundo”. Una mayor elevación equivale a una temporada de cultivo más corta, lo que a su vez produce sabores de fruta más brillantes y un vino más ligero en el paladar[3].
La región de Rioja Alavesa se encuentra en la provincia de Álava, en el País Vasco, en la orilla norte del río Ebro. A pesar de compartir un clima similar al de la región de Alta, la Rioja Alavesa produce vinos con más cuerpo y mayor acidez[3] Los viñedos de la zona tienen una baja densidad de viñedos con una gran separación entre hileras. Esto se debe a las condiciones relativamente pobres del suelo, ya que las vides necesitan más distancia entre sí y menos competencia por los nutrientes del suelo circundante[4].
Recetas de Rioja
La Rioja está situada en la ruta del Camino de Santiago. Es una tierra de viajeros y de intercambios, donde se establecen relaciones y se intercambian cultura y costumbres. Todo ello se refleja en su gastronomía que, además de ofrecer al viajero la oportunidad de degustar vinos de gran calidad, también se ha visto muy influenciada por sus regiones vecinas, adaptando los platos con ese toque de exquisita sencillez tan típico de esta zona.
La calidad del vino es lo que ha convertido a La Rioja en un nombre muy conocido. Su Denominación de Origen, famosa en todo el mundo, incluye vinos blancos y rosados, pero son los excelentes tintos los más apreciados. Estos se envejecen en barricas llamadas “barricas” para producir crianzas y reservas que, ya sean de Rioja Alta, Alavesa o Baja, obtienen magníficos niveles de calidad.
Para terminar, la “golmajería”, como llaman en La Rioja a la repostería, ya que toda buena comida tiene que terminar con un buen postre. Entre los dulces riojanos se encuentran los “Hormigos” elaborados con harina, miel, leche y caramelo, los ricos mazapanes de Soto, los “Molletes” de Santo Domingo de la Calzada, el “Fardelejo” (una pequeña empanada rellena de almendra) y las frutas de la mejor calidad: manzanas, peras, melones… que se pueden comer frescas, pero también cocinadas en vino naturalmente riojano, produciendo una sorprendente combinación de sabores.
El vino de la rioja
A pocas puertas, en el mismo lado de la calle, se encuentra el Bar Donosti. Este bar es conocido por sus “tostas”, que son pequeños trozos de pan tostado. La mejor es la que lleva una gruesa capa de queso de cabra, mermelada de melocotón y nueces. También se puede elegir entre una mermelada de manzana o una cobertura de tomate sobre el queso de cabra. Otra de sus especialidades es la de boletus con jamón, otra tosta con jamón serrano y boletus. Todas sus tostas se calientan antes de ser servidas, se ponen pegajosas pero merecen la pena.
Retrocede un poco y dirígete a Blanco y Negro. Inicialmente nos saltamos esta joya para mezclarla antes de volver a visitar la delicia culinaria que es el queso de cabra. Blanco y Negro está en la Travesía del Laurel pero justo al final de la calle del Laurel. Este lugar tiene muchas tapas para elegir pero su mejor es el queso de cabra, con jamón y mermelada de frambuesa. Se trata de un trozo de baguette untado con queso de cabra y cubierto con jamón serrano, jamón español y mermelada de frambuesa. Es absolutamente delicioso y combina perfectamente con una copa de Rioja.
La mejor comida con rioja
En colaboración con ARAEX Grands Al ser el tercer país productor de vino, no falta diversidad en el vino español. Pero con tantas opciones, encontrar el maridaje perfecto puede parecer una tarea desalentadora.
Los mejores sumilleres españoles Guillermo Cruz, Mejor Sumiller de España 2014 y Sumiller Jefe del restaurante Mugaritz, y Manuel Jiménez, Mejor Sumiller de España 2017 y Sumiller de La Cava de Pyrene, comparten sus consejos y combinaciones de sabores favoritas para maridar el vino español con la comida.
“Estos cavas suelen estar vinificados en roble y muchos pasan más de cinco años en botella, por lo que son complejos, con mucho cuerpo y suelen ser secos, con una dosis baja”, explica Jiménez, que sugiere probar el Cava Paraje Calificado con una cocina más contundente.
“El largo periodo de crianza del Cava con un contacto prolongado con el menos le da al vino una oxidación controlada, que marida bien con el tartar de ostras que tiene una nota yodada que imita la percepción de la oxidación. Las burbujas del Cava hacen todo lo demás: limpiar el paladar y crear una afinidad entre las texturas líquidas y sólidas”.