Se estropea en la nevera
Las familias gastan una media de 300 dólares más al mes debido a la inflación. La comida es una de las muchas cosas que se encarecen, y eso significa que tus viajes al supermercado deben centrarse más en las cosas que realmente necesitas. Puedes empezar por aprender a conservar la vida útil de los alimentos de tu nevera -como la carne, la leche, los huevos, la fruta y la verdura- y a tirar sólo los que se han estropeado. Existen algunos métodos infalibles para prolongar la vida útil de los alimentos de la nevera, como mantener los productos lácteos perecederos en la parte más fría del frigorífico y utilizar un elemento básico de cocina sorprendentemente sencillo para evitar que la lechuga se pudra. La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) recomienda mantener los alimentos refrigerados a una temperatura igual o inferior a los 40 grados Fahrenheit, y la Clínica Mayo afirma que, después de cuatro días, aumenta el riesgo de que aparezcan bacterias dañinas. Si algo huele mal o tiene mal aspecto, no merece la pena correr el riesgo, así que deséchalo. Recomendamos hacer la prueba del olfato antes de comer cualquier cosa que lleve demasiado tiempo en la nevera. Para saber más, consulta estas formas de ahorrar dinero en los artículos que compras habitualmente. Este artículo ha sido actualizado recientemente.
Palabra de estropear en la nevera
Aunque pueda parecer una parte pequeña de la preparación de los alimentos, la refrigeración desempeña un papel importante en el mantenimiento de la seguridad de los alimentos. La temperatura del frigorífico, el orden de los alimentos en las estanterías y el tiempo que se deja en el frigorífico pueden desempeñar un papel importante en el crecimiento de bacterias u otros patógenos dañinos en los alimentos.
Para evitar que los alimentos alcancen una temperatura en la que los patógenos puedan crecer en ellos, es importante medir la temperatura del frigorífico con frecuencia. Mantener el frigorífico a 5°C (41°F) o menos garantiza un entorno que minimiza el crecimiento de patógenos.
Esto puede ser muy importante, especialmente si hay un corte de luz. Si cuando se enciende, el refrigerador sigue a 41°F o menos, los alimentos son seguros para consumir. Si la temperatura del refrigerador supera los 41°F, los alimentos no deben consumirse ya que existe un mayor riesgo de enfermedades transmitidas por alimentos.
Aunque no parezca importante, el orden incorrecto de los alimentos en los estantes podría promover el crecimiento de patógenos, aumentando el riesgo de enfermedades transmitidas por los alimentos. Los estantes deben estar ordenados de menor a mayor temperatura de cocción, en sentido descendente. Esto se hace para evitar que los jugos u otros líquidos de los alimentos que se cocinan a mayor temperatura contaminen los alimentos que no alcanzan esa temperatura.
Los alimentos se estropean rápidamente en la nevera
Además, el tiempo de conservación depende de la cantidad de agua que tenga un determinado producto. Cuanto mayor sea el contenido de humedad del producto, menor será su vida útil. Por tanto, el uso de envases y film transparente no es en absoluto un capricho, sino las medidas necesarias para limitar el acceso del oxígeno a los alimentos.
Un factor no poco importante es la proximidad del producto en el frigorífico. Por ejemplo, si se coloca una bolsa de fruta abierta junto a la carne, los aceites esenciales acelerarán la fermentación de la carne. Por lo tanto, es muy importante organizar adecuadamente el almacenamiento de los alimentos en los estantes del frigorífico.
A temperatura ambiente, la mayoría de los alimentos se estropean en pocas horas debido a la proliferación de bacterias. Por ello, el frigorífico se considera el lugar más seguro para mantener los alimentos frescos durante más tiempo. La temperatura dentro del frigorífico es mucho más baja que la temperatura ambiente, lo que inhibe el crecimiento de las bacterias. Sin embargo, el frigorífico ayuda a conservar las propiedades útiles y la calidad sólo si los alimentos se almacenan correctamente.
¿Por qué se estropean los alimentos en la nevera?
Las bacterias que provocan intoxicaciones alimentarias pueden crecer y multiplicarse en algunos tipos de alimentos con más facilidad que en otros. Desgraciadamente, el pescado, la carne y las aves de corral se encuentran en este grupo de alto riesgo. Las bacterias nocivas comienzan a desarrollarse en la carne cruda desde el momento en que se sacrifica el animal, lo que hace que el almacenamiento sea un proceso sensible al tiempo.
Las bacterias se multiplican más rápidamente en la “zona de peligro” de la temperatura, que se sitúa entre los 5°C y los 63°C. Por ello, es especialmente importante sacar el pescado, la carne y las aves de corral de esta zona de temperatura lo antes posible.
También hay que tener en cuenta el problema de la contaminación, ya que los alimentos que no son de alto riesgo, como la fruta y la verdura, se vuelven peligrosos al entrar en contacto con alimentos de alto riesgo. Si a esto le añadimos la importancia de garantizar que la carne se cocine bien, el uso adecuado de estos ingredientes se convierte en un proceso muy complejo.
Es importante practicar una buena seguridad alimentaria desde el momento en que los alimentos entran en la cocina. En primer lugar, hay que estar atento a su temperatura y a aquello con lo que entra en contacto, desde las superficies hasta otros alimentos. Si la temperatura está por encima de los niveles seguros de almacenamiento de alimentos, no acepte la entrega, ya que el alimento podría ser inseguro y potencialmente peligroso.