Cóctel de vodka de caña de azúcar
La cachaça es la bebida típica de Brasil, apreciada en todo el mundo, también conocida como aguardiente, ron, caninha y muchos otros nombres, algunos populares. Puede consumirse en su forma simple, pero se utiliza más a menudo como base de otras bebidas, como la caipirinha.
La cachaça es la bebida típica de Brasil, apreciada en todo el mundo, también conocida como brandy, ron, caninha y muchos otros nombres, algunos populares. Puede consumirse en su forma simple, pero se utiliza más a menudo como base de otras bebidas, como la caipirinha.
Cóctel de zumo de caña de azúcar y ron
PreparaciónColocar la lima y el azúcar en un vaso old fashioned doble y remover suavemente. Llene el vaso con hielo picado y añada la cachaça. NotasCaipiroska: en lugar de cachaça, utilice vodka. Receta de Caipirinha de la International Bartenders Association.
Aunque se desconoce el origen de la bebida, un relato dice que surgió alrededor de 1918 en la región de Alentejo, en Portugal, con una receta popular hecha con limón, ajo y miel, indicada para pacientes con gripe española. Según otro relato, la Caipirinha se basa en la Poncha, una bebida alcohólica de Madeira (Portugal)[2], cuyo ingrediente principal es el aguardiente de caña. Los portugueses trasladaron la producción de caña de azúcar de Madeira a Brasil porque necesitaban más tierra para plantarla. Antes de esto, los habitantes de Madeira ya habían creado el aguardiente de caña, que fue el antecesor de la cachaça[3].
Hoy en día, se sigue utilizando como tónico para el resfriado común. Comúnmente, los practicantes añaden un poco de aguardiente destilado a los remedios caseros para acelerar el efecto terapéutico. El aguardiente se utilizaba habitualmente. “Hasta que un día alguien decidió quitarle el ajo y la miel. Luego añadió unas cucharadas de azúcar para reducir la acidez de la cal. El hielo vino después, para alejar el calor”, explica Carlos Lima, director ejecutivo del IBRAC (Instituto Brasileño de la Cachaça)[4][5].
Receta de cóctel de caña de azúcar
Si ha viajado al país sudamericano, es muy probable que se haya encontrado con la Caipirinha, la bebida nacional de Brasil. Refrescante y fácil de preparar, el cóctel contiene zumo de lima fresco, azúcar y cachaça, una bebida espirituosa tan esencial para la identidad brasileña como la samba, el fútbol y el carnaval. La cachaça es también la bebida alcohólica nacional del país, lo que vincula inextricablemente esta bebida a su hogar.
Elaborada por primera vez en el siglo XVI, la cachaça es similar al ron, pero tiene un sabor propio. La mayoría de los rones se destilan de la melaza, un subproducto del procesamiento de la caña de azúcar, mientras que la cachaça se destila del zumo fermentado de la caña de azúcar. Esta importante diferencia da lugar a una bebida espirituosa distinta, caracterizada por su sabor a hierba, que distingue a la caipiriña de otros cócteles agridulces como el daiquiri.
No se sabe con exactitud cuándo apareció la Caipirinha, pero muchos historiadores creen que se servía a principios del siglo XX como remedio contra las enfermedades. Otros afirman que la inventaron en el siglo XIX los agricultores brasileños para dar a conocer la caña de azúcar local. Independientemente de cómo o cuándo nació, los bebedores se han inclinado desde entonces por sus agradables sabores y embriagadores efectos.
Cócteles con aguardiente de caña
La fabricación del ron tiene su origen en la llegada de la caña de azúcar a América. Las primeras versiones de esta bebida alcohólica se elaboraban con melaza (melaza negra), un subproducto viscoso no cristalizable del refinado de la caña de azúcar para obtener azúcar. A finales del siglo XIX, tras una sobreproducción de azúcar, algunas destilerías empezaron a destilar vino de caña de azúcar, el primer rhum agricole/ron de jugo de caña.
La caña de azúcar se reproduce por esquejes. Las cañas se cortan en secciones, cada una con dos o tres yemas, y se entierran. La cosecha comienza justo antes de que la caña florezca, cuando la concentración de azúcar ha alcanzado su punto máximo. Como el azúcar se acumula en los tallos inferiores, éstos se cortan a ras del suelo. A continuación, los tallos se cortan en trozos y se hacen pasar varias veces por una serie de molinos. Se riegan a medida que se trituran, ya que al empapar las fibras se disuelve el azúcar residual, aumentando así la cantidad de azúcar extraída. El zumo de caña resultante se denomina “vesou” y el líquido viscoso residual es la base de la melaza. La fermentación del zumo de caña o de la melaza diluida con agua implica que la levadura descompone el azúcar y produce alcohol (etanol). Una vez finalizado este proceso, el vino de caña tiene una graduación alcohólica del 5% (10 grados), mientras que cuando se utilizan melazas, la graduación puede alcanzar el 10% (20 grados). A continuación, el líquido se destila para separar el agua del alcohol y las sustancias aromáticas. A continuación, el ron se valora hasta alcanzar un 70% de alcohol (140 grados) y se le añade agua de manantial para rebajar su contenido alcohólico.