Lista de mariscos
El pescado es un alimento rico en proteínas y bajo en grasas que aporta una serie de beneficios para la salud. El pescado de carne blanca, en particular, tiene menos grasa que cualquier otra fuente de proteína animal, y el pescado azul tiene un alto contenido de ácidos grasos omega-3, o las grasas “buenas”. Dado que el cuerpo humano no puede producir cantidades significativas de estos nutrientes esenciales, el pescado es una parte importante de la dieta. Además, el pescado tiene un bajo contenido de las grasas “malas” que suelen encontrarse en la carne roja, denominadas ácidos grasos omega-6.
Además de comer pescado, otra forma de consumir ácidos grasos omega-3 es tomando suplementos comprados en tiendas. Los aceites de pescado proceden tanto de peces capturados como alimento para humanos como de peces pequeños capturados para la alimentación animal, como las anchoas peruanas.
Las fuentes alternativas de omega-3 provienen de fuentes terrestres como la linaza, las nueces y el germen de trigo. Aunque siguen siendo beneficiosas, no parecen aportar tantos beneficios para la salud como los omega-3 que se encuentran en el pescado, el marisco y las algas marinas.
En general, el pescado es una fuente de alimento saludable y puede consumirse con seguridad en la mayoría de los casos. Pero dependiendo de la edad y las circunstancias de salud, algunas personas deberían limitar las cantidades de pescado que comen. Tenga en cuenta lo siguiente:
Qué nutrientes tienen las legumbres
El marisco es saludable porque contiene nutrientes esenciales en cantidades abundantes, pero la composición de estos nutrientes varía según la especie. Además, el marisco es una buena fuente de proteínas y también es bajo en grasas saturadas poco saludables.
Los ácidos grasos omega-3 son un tipo de ácido graso poliinsaturado (PUFA). Son un componente esencial de la dieta humana porque nuestro cuerpo no puede fabricarlos. Estas grasas son necesarias para el correcto crecimiento y desarrollo del cerebro. Los ácidos grasos omega-3 son más abundantes en los pescados grasos de aguas profundas y en algunos aceites vegetales. Tienen efectos antiinflamatorios en el organismo y pueden ser útiles en la prevención y el tratamiento de numerosas afecciones.
El contenido de ácidos grasos omega-3 varía mucho entre las distintas especies de pescado. Los peces grasos de agua fría son los que tienen un mayor contenido de ácidos grasos omega-3 porque su fisiología, su entorno y su dieta favorecen la producción de ácidos grasos omega-3 en su carne.
1) La grasa no está distribuida uniformemente por todo el pescado: el contenido de grasa disminuye en realidad a partir de la cabeza y en dirección a la cola… 2) El nivel de grasa depende del momento de la captura del pescado. La mayoría de los peces son más magros después del desove, ya que se “engordan” hasta el siguiente desove.
¿En qué nutrientes es rico el marisco?
El marisco salva vidas. Según un estudio de Harvard, comer 8 onzas de marisco a la semana reduce el riesgo de morir por una enfermedad cardíaca en un 36%. Las enfermedades del corazón son la primera causa de muerte de las mujeres en todo el mundo. Las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares causan el 30% de todas las muertes en el mundo, y 800.000 muertes al año en Estados Unidos.
El marisco es un alimento rico en nutrientes, con un alto contenido en vitaminas y ácidos grasos omega-3, pero sólo 1 de cada 5 estadounidenses come marisco dos veces por semana, como recomienda el USDA. Comer de 8 a 12 onzas de marisco a la semana durante el embarazo puede mejorar el coeficiente intelectual, el desarrollo cognitivo y la salud ocular del bebé. Los adultos mayores que consumen mucho pescado viven una media de 2,2 años más.
El marisco aporta nutrientes esenciales al organismo. Entre ellos se encuentran las vitaminas A, B y D, así como los ácidos grasos omega-3. El pescado también es rico en calcio y fósforo y una gran fuente de minerales, como hierro, zinc, yodo, magnesio, selenio y potasio. La vitamina A ayuda a proteger la visión y a reforzar el sistema inmunitario. Las vitaminas del complejo B influyen en la producción de energía, el metabolismo y la concentración. El marisco es una de las únicas fuentes alimentarias de vitamina D, que favorece el crecimiento saludable de los huesos, la absorción del calcio y potencia la eficacia del sistema inmunitario y el crecimiento celular.
El pescado más gordo
El pescado es una proteína de alta calidad y baja en grasas. El pescado está lleno de ácidos grasos omega-3 y vitaminas como la D y la B2 (riboflavina). El pescado es rico en calcio y fósforo y una gran fuente de minerales, como hierro, zinc, yodo, magnesio y potasio. La Asociación Americana del Corazón recomienda comer pescado al menos dos veces por semana como parte de una dieta saludable. El pescado está repleto de proteínas, vitaminas y nutrientes que pueden reducir la presión arterial y el riesgo de sufrir un ataque al corazón o un derrame cerebral.
El consumo de pescado es una fuente importante de ácidos grasos omega-3. Estos nutrientes esenciales mantienen sanos el corazón y el cerebro. Dos ácidos grasos omega-3 que se encuentran en el pescado son el EPA (ácido eicosapentaenoico) y el DHA (ácido docosahexaenoico). Nuestro cuerpo no produce ácidos grasos omega-3, por lo que debemos obtenerlos a través de los alimentos que ingerimos. Los ácidos grasos omega-3 se encuentran en todo tipo de pescado, pero son especialmente altos en los pescados grasos. Algunas buenas opciones son el salmón, la trucha, las sardinas, el arenque, la caballa en conserva, el atún claro en conserva y las ostras.