Suplementos para el hígado graso
El hígado es un órgano extraordinario con enormes propiedades regenerativas. Ayuda a la digestión, junto con los intestinos, el páncreas y la vesícula biliar; limpia nuestra sangre y ayuda a metabolizar los medicamentos y a desintoxicar las sustancias químicas. En la medicina tradicional china, el hígado transporta el qi, la fuerza vital, a nuestros músculos y articulaciones.
El hígado, junto con los riñones, es un importante sistema de filtración de toxinas. El hígado también influye en nuestras hormonas, visión, uñas y piel. Los chinos consideran que el hígado es el “General” del cuerpo, un líder al mando del que deriva gran parte de nuestra salud o enfermedad.
El estilo de vida moderno supone una enorme carga para el hígado debido a los alimentos grasos, las drogas de todo tipo, el alcohol y las dietas ricas en productos animales. Las siguientes recetas son nutritivas para el elemento madera, o hígado, según la cocina de los cinco elementos, y son una alternativa maravillosa si estás diseñando un menú con el objetivo de proteger y ayudar a tu función hepática.
Tratamiento del hígado graso
La enfermedad del hígado graso, como su nombre indica, es una condición médica causada por la acumulación de grasa en el hígado. Hay dos tipos principales: la inducida por el alcohol (causada por el consumo excesivo de alcohol) y la no alcohólica (se produce aunque no se haya bebido nunca). Alrededor del 5% de la población de Estados Unidos padece hígado graso alcohólico. Y aproximadamente 100 millones de personas en EE.UU. tienen la enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD); es la enfermedad hepática más común en los niños. La forma más grave se denomina esteatohepatitis del hígado graso no alcohólico (EHGNA), que puede evolucionar hacia enfermedades más graves como la cirrosis y el cáncer de hígado. Independientemente del tipo que se tenga, el mejor tratamiento es un cambio en el estilo de vida -que incluye perder peso, evitar el alcohol y seguir una dieta para hígado graso- para revertir la afección hepática.
Para combatir la enfermedad del hígado graso, es esencial realizar cambios estratégicos y duraderos en la dieta, en lugar de limitarse a evitar o integrar alimentos al azar aquí y allá. “La parte más importante de estos cambios es que deben ser sostenibles”, dice la doctora Aymin Delgado-Borrego, gastroenteróloga pediátrica y de adultos jóvenes y especialista en salud pública de Kidz Medical Services en Florida. En general, la mejor dieta para el hígado graso incluye:
Recetas de comida limpia
Si le han diagnosticado hígado graso o está preocupado por desarrollarlo, los alimentos que consuma podrían marcar la diferencia para salvarle la vida. Aparte de tener una predisposición genética o una condición de absorción subyacente como el síndrome del intestino permeable, una de las principales causas de la enfermedad del hígado graso es la mala alimentación. Al centrarse en la pérdida de peso saludable y una dieta mejorada, puede revertir el hígado graso y restaurar su función hepática a niveles óptimos. Con ese fin, aquí están cinco de las más sabrosas recetas de pollo para el hígado graso para empezar a planificar una comida saludable.
El hígado graso podría referirse a dos tipos diferentes de enfermedad hepática: la enfermedad de hígado graso alcohólica y la no alcohólica. Cada una de ellas se produce cuando hay una mayor acumulación de grasa (triglicéridos) en el hígado. He aquí las distinciones adicionales.
Para revertir potencialmente la enfermedad del hígado graso alcohólico, lo primero es desintoxicarse del alcohol. Para el hígado graso no alcohólico, una dieta para el hígado graso centrada en la salud del hígado es su mejor medicina.
La dieta para el hígado graso, al igual que cualquier otra dieta saludable, incluye alimentos integrales como frutas y verduras, proteínas dietéticas y alimentos ricos en fibra como las legumbres y los cereales integrales. No se diferencia del plan de la dieta mediterránea, que da prioridad a alimentos como el aceite de oliva prensado en frío y el pescado sobre los aceites vegetales refinados y la carne roja. Un rápido resumen de los alimentos que pueden mejorar el hígado graso incluyen:
Arroz del Norte
Los médicos predican la importancia de una dieta saludable, pero la nutrición no siempre es única. En el caso de los pacientes con hígado graso, la enfermedad hepática crónica más común del país, que afecta a unos 100 millones de estadounidenses y puede provocar cirrosis y cáncer, es importante centrarse en la dieta y en los cambios de estilo de vida.
Como dietista y nutricionista registrada en la Clínica de Enfermedades Metabólicas y del Hígado Graso de la Universidad de Chicago, recomiendo una dieta llena de grasas saludables y alimentos de origen vegetal -así como hasta tres tazas de café al día- para ayudar a mantener el hígado sano.
Según la Fundación Americana del Hígado, aún no existen tratamientos médicos para la enfermedad del hígado graso no alcohólico. Esto significa que seguir una dieta saludable y hacer ejercicio con regularidad son las mejores maneras de prevenir el daño hepático o de revertir la enfermedad una vez que se encuentra en las primeras etapas. Sabemos que la gente no quiere sentir que está a “dieta”, por lo que trabajamos muy duro con nuestros pacientes para ayudarles a centrarse en los cambios de estilo de vida, lo que incluye una dieta saludable, ejercicio y dormir mucho y bien.