Cultivo de desalinización
ResumenEl objetivo del estudio era el diseño de un contenedor flotante para el cultivo de plantas comestibles en el mar. Los elementos necesarios para cultivar plantas en el mar a bajo coste serían un alambique solar para producir agua dulce, una maceta o contenedor de cultivo de plantas y un sistema de flotación. Para realizar las funciones de alambique solar y maceta, se utilizaron diferentes botellas de plástico para envasar bebidas carbonatadas, aceite y agua. Con dos botellas cortadas en su base e insertadas una dentro de la otra y un trozo de poliuretano de hierro como sistema de flotación, fue posible construir un pequeño invernadero solar y utilizar el agua de mar para cultivar algunas plantas comestibles para el hombre, como espinacas (Spinacia oleracea L.) y trigo (Triticum aestivum L.). Con un diseño adecuado de las botellas (en forma de seta), sería posible eliminar el sistema de flotación necesario. El dispositivo puede utilizarse para reciclar plásticos y producir algunos cultivos verdes y alimentos a bajo coste utilizando agua de mar de forma ecológica y sostenible.
ReferenciasDescargar referenciasAgradecimientosEste estudio ha sido financiado por el Instituto de Investigación y Formación Agraria de la Junta de Andalucía. El autor agradece a los revisores anónimos sus acertados comentarios que han mejorado notablemente la calidad del manuscrito.
Invernadero de agua de mar
Las alcaparras suelen conservarse en sal, por lo que, antes de ser consumidas, deben someterse a un procedimiento conocido como “Desalado”, por lo que ahora veremos cómo se desalan las alcaparras.El proceso de desalado es subestimado por muchos y se realiza de forma incorrecta. En realidad, saber cómo desalar correctamente las alcaparras significa resaltar su sabor único, sin arruinar su textura.Veamos ahora los procedimientos exactos para conservar plenamente su sabor inconfundible.
La desalación con remojo en aguaLas alcaparras saladas deben sumergirse en agua a temperatura ambiente durante 12 horas, el agua debe ser aproximadamente el doble de la cantidad de alcaparras. Cambie el agua unas 3-4 veces a lo largo de 12 horas, probando, para comprobar el equilibrio entre el sabor de la alcaparra y la sal residual. Si utiliza alcaparras medianas o grandes, los tiempos de remojo aumentan y el agua debe cambiarse con más frecuencia. Si, en cambio, tiene que desalar cantidades muy pequeñas de alcaparras, puede ponerlas en un colador y enjuagarlas bajo el grifo, y luego dejarlas en remojo en agua fría durante una o dos horas.
Demasiada sal qué hacer
El exceso de sodio puede elevar la presión arterial, lo que a su vez puede provocar accidentes cerebrovasculares, enfermedades cardíacas y renales. Reducir la ingesta de sal o sodio es una forma de disminuir el riesgo de padecer estas enfermedades. La dieta estadounidense está cargada de sodio que proviene de los alimentos y bebidas procesados, y las verduras enlatadas son un gran culpable, ya que contienen de seis a ocho veces más sodio que las verduras frescas o congeladas, según el sitio web del Hospital del Condado de Cavalier de Langdon (Dakota del Norte). Es fácil reducir la cantidad de sodio de cada lata.
Enjuague las verduras en agua corriente durante al menos 30 segundos antes de calentarlas, cocinarlas o comerlas. Según el sitio web del Hospital del Condado de Cavalier, este acto de enjuague con agua corriente sirve para eliminar una gran parte del exceso de sodio.
Advertencia Aunque las verduras congeladas suelen ser una alternativa viable a las enlatadas si el objetivo es eliminar el sodio, no todas las verduras congeladas son iguales. Es importante que los consumidores lean las etiquetas, ya que algunas habas o guisantes congelados contienen sal.
Demasiada patata salada
No hay nada peor que trabajar como un esclavo en una olla de sopa (o cualquier plato) sólo para destruirla por exceso de sal. Ya sea que hayas puesto horas de esfuerzo en la sopa o muy poco, la decepción sigue siendo aplastante. “¡No hay sopa para ti!”
Por suerte, hay algunas soluciones que pueden salvar una sopa demasiado sazonada, y una de ellas resulta ser un truco de cocina que probablemente sea anterior a la mayoría de los trucos que has visto últimamente en Internet. Algunos lo llaman “cuento de viejas”, mientras que otros lo defienden. Yo aprendí el truco de mi madre. Se trata de lo siguiente:
No dejes que la patata se cocine tanto tiempo como para que se desintegre en la sopa. Deja que se cueza lo justo para que casi se cocine. La patata absorberá parte de la sal y parte del líquido. El almidón que añade la patata también compensará toda la sal extra. Para aprovechar al máximo la superficie de la patata, puedes cortarla en mitades o cuartos. Cuando retires la patata, tu sopa debería saber menos salada.
Sin embargo, la patata no eliminará por completo la sal. Los detractores afirman que el truco es falso, pero una modesta diferencia puede ser significativa. The Kitchn probó recientemente el método de la patata y encontró una distinción “sutil” y concluyó que, aunque el truco de la patata no es un “consejo alucinante”, es un recordatorio de que los almidones y las verduras pueden ser “adiciones sabrosas” además de “ayudar a absorber la sal extra”.