Salsa de vino de ciruelas
Dos de las mejores partes de una comida italiana son el vino tinto y la deliciosa salsa para pasta. Además, combinan a la perfección y en la tienda de Giolitti Deli puedes encontrar ambas cosas. Pero, ¿qué es lo que hace que esta combinación sea tan buena y cómo combinarla para obtener el máximo sabor? Siga leyendo para descubrirlo.
El alcohol presente en el vino desencadena la liberación de moléculas de sabor en la salsa, haciendo que todos los ingredientes con los que entra en contacto el vino sepan aún mejor. Además, el vino tinto disuelve las grasas, lo que permite que los ingredientes de la salsa liberen matices de sabor. Otros líquidos como el caldo, el agua, el aceite de oliva o la mantequilla no liberan el mismo sabor.
Al seleccionar el vino tinto, elija uno con la acidez suficiente para que la salsa de tomate no lo domine. Un Chianti suele ser popular, ya que la uva utilizada en ese vino tiene la acidez necesaria para maridar bien con la salsa de tomate.
Si no sabe distinguir entre la salsa de pasta al vino tinto y la salsa de pasta normal, haga una prueba a ciegas. Pídale a un familiar que le prepare dos platos de pasta distintos, pruebe cada uno de ellos y probablemente notará que uno sabe mejor que el otro. El intenso sabor del vino tinto de alta calidad puede ser el factor decisivo para conseguir platos de pasta increíbles.
¿Para qué sirve añadir vino tinto a la salsa?
El alcohol presente en el vino desencadena la liberación de moléculas de sabor en la salsa, lo que hace que todos los ingredientes con los que entra en contacto el vino sepan aún mejor. Además, el vino tinto disuelve las grasas, lo que permite que los ingredientes de la salsa desprendan matices de sabor.
¿Cuál es el mejor vino para la salsa de vino tinto?
Los vinos tintos como el merlot, el cabernet sauvignon y el pinot noir son los más comunes en las salsas de reducción de vino tinto porque son amaderados, ligeramente dulces, con cuerpo y más secos. Un zinfandel tinto tiende a ser demasiado dulce para una salsa de vino tinto, pero todo depende de las preferencias personales.
Receta de salsa de ciruelas
Suavemente horneadas en un sirope de vino tinto especiado, estas ciruelas son sabrosas, ricas y el postre perfecto para finales de verano. Sírvalas calientes, a temperatura ambiente o frías. No puede faltar una buena bola de helado de vainilla.
Las temperaturas del horno son para horno convencional; si se utiliza ventilador forzado (convección), reduzca la temperatura 20˚C. | Utilizamos cucharadas y tazas australianas: 1 cucharadita equivale a 5 ml; 1 cucharada equivale a 20 ml; 1 taza equivale a 250 ml. | Todas las hierbas son frescas (a menos que se especifique lo contrario) y las tazas están ligeramente envasadas. | Todas las verduras son de tamaño medio y están peladas, salvo que se especifique lo contrario. | Todos los huevos son de 55-60 g, a menos que se especifique.
Partir las ciruelas por la mitad y quitarles el hueso. Colocarlas en una sola capa en una fuente de horno lo suficientemente grande para que quepan. Añadir las especias a la fuente. Mezclar el vino tinto y el azúcar en un bol o una jarra y remover hasta que se disuelva el azúcar. Verter sobre las ciruelas.
Hornear durante 25-30 minutos, rociando las ciruelas con el sirope de vino tinto 2-3 veces durante el horneado, o hasta que las ciruelas estén tiernas al pincharlas con una brocheta. Servir las ciruelas calientes, a temperatura ambiente o frías con un poco del líquido de escalfar y helado.
Receta de salsa de pato
Una bonita alternativa al asado que se prepara en menos de media hora. Merece la pena preparar su propia salsa de ciruelas y vino tinto, sobre todo porque es prácticamente imposible encontrarla en las tiendas. Deja reposar el pato unos cinco minutos antes de cortarlo.
Mientras tanto, prepara la salsa de ciruelas y vino tinto. Para empezar, sofríe la chalota picada en un chorrito de aceite de oliva caliente hasta que se ablande. Añada el vino tinto y el caldo. Triturar con una batidora de mano si se desea una salsa suave, que es lo que yo prefiero. Cocer a fuego lento unos 10 minutos. Añadir el azúcar moreno y remover.
Reducción de vino de ciruela
* Filete o solomillo de ternera * Sal, pimienta blanca y negra, guindilla (pepperoncini) * Curry * Mostaza de Dijon * Aceite de oliva * Vino tinto * Vinagre balsámico * Harina de maíz (almidón de maíz) para ligar la salsa * Mermelada de ciruela* Destilado de ciruela o esencia de ciruela Preparación:
Salpimentar la ternera y dorarla por todos los lados en una sartén con aceite de oliva, después dejarla reposar a fuego lento hasta que esté al punto. Cortar en lonchas contra la textura de la carne y colocar en un plato. Espolvorear con sal y salsa especiada de ciruelas y vino tinto.
Reduzca el vino tinto en una cacerola con abundante mermelada de ciruelas, mostaza de Dijon, guindilla, pimienta recién molida, curry, sal y vinagre balsámico. Al final, añada un chorrito de destilado de ciruela para darle un toque potente y siga enfriando hasta que la salsa tenga una consistencia espesa. Si no se consigue, añadir un poco de harina de maíz.